Unas veinte “Damas de blanco”, como se les conoce a las esposas y familiares de los 75 disidentes encarcelados hace 18 meses, realizaron ayer una marcha pacífica y silenciosa para exigir la libertad de sus parientes.

“Protestamos por las condiciones infrahumanas de nuestros presos, por la forma tan cruel que están siendo tratados”, dijo a la prensa Dolia Leal, esposa de Nelson Aguiar, condenado a 13 años.