El paquete de licitaciones petroleras quedó listo. El Ministerio de Energía y Minas publicará, la próxima semana en los diarios del país, la convocatoria de licitación para cinco áreas petroleras operadas por la empresa estatal Petroecuador.
Los campos son Shushufindi, Auca, Culebra-Yulebra, Lago Agrio y Cononaco, cuyas reservas remanentes (en el sitio) bordean los 900 millones de barriles.
Eduardo López, ministro de Energía, dijo que se promocionarán en el país, a través de la prensa y vía páginas electrónicas (web) del ministerio y Petroecuador.
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López suscribirá contratos de obras, bienes y servicios con la o las compañías ganadoras. Dicha figura legal consta en el artículo 17 de la Ley de Hidrocarburos.
La modalidad de obras, bienes y servicios permite que personas jurídicas se comprometan a ejecutar para Petroecuador trabajos específicos, con la aportación de tecnología, capitales, equipos o maquinarias necesarias para el cumplimiento de las obligaciones contraídas, a cambio de un precio o remuneración en dinero.
El costo de los servicios y la forma de pago será convenida entre la contratista y el Estado, antes de suscribirse el contrato. Las licitaciones corresponden a la primera fase de licitaciones; en una segunda estará el eje estructural Ishpingo Tambococha Tiputini (ITT) y los bloques del suroriente.
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Según el Ministerio, al 31 de diciembre del 2003, las reservas remanentes de Shushufindi fueron de 549,87 millones de barriles; Auca, 162,97 millones; Culebra-Yulebra, 55,43 millones; Lago Agrio, 62,18 millones; y Cononaco, 35,12 millones de barriles.
Contratos
En tanto, el procurador, José María Borja, recordó que solicitó a la Dirección Nacional de Hidrocarburos la información sobre todos los contratos que las petroleras mantienen con el país.
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Aunque no puso plazo para revisar los convenios, señaló que si encuentra alguna irregularidad, solicitará su inmediata nulidad. Luego de un homenaje que el Municipio de Quito le ofreció anoche en el Museo de la Ciudad, el funcionario indicó que las petroleras deben respetar los contratos ya que “hay un ordenamiento jurídico que debe cumplirse”.