Con historias que hablaban de la presencia del diablo en la cultura popular, el pasado miércoles concluyó el Festival de Teatro Santiago de Guayaquil ‘Un cerro de cuentos’.

Gracias Ángela, gracias Raquel por este festival. La voz era de la actriz María Fernanda Gutiérrez, que desde el público y entre aplausos, agradecía los cuatro días de palabra, de historias y de música. Eran las 21h00 del miércoles 1 de septiembre y Ángela Arboleda y Raquel Rodríguez, desde el escenario del MAAC Cine, despedían el Festival de Teatro Santiago de Guayaquil ‘Un cerro de cuentos’, organizado por ellas, que esa noche llegaba a su fin.

El narrador colombiano Misael Torres, quien hasta minutos antes había estado actuando en el sitio y ahora se hallaba al lado de Ángela y Raquel, fue el encargado de cerrar esta cita artística, con historias del diablo, recogidas en sus investigaciones por varios países de América Latina. Durante más de una hora, con su voz, sus gestos y una escenografía austera, mínima, recreó cuentos y leyendas que forman parte de la cultura popular de este continente.

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El teatro, en esa noche, estuvo casi lleno. Las risas de los niños y de los adultos eran frecuentes, así como su participación desde los asientos. Torres proponía interactividad. Hacía cantar al público estribillos como aquel que decía: “el que tiene cabeza no baila, no baila”, para acompañar una de sus historias, esa en la que los pollos mataron al diablo y a la diabla; o adivinar lo que los personajes de los cuentos harían.

Esa complicidad del público fue más evidente aquella noche, pero no faltó en ninguna de las cuatro que duró el festival. La argentina Ana Padovani y los ecuatorianos Don Pascual y Papá Roncón actuaron, en las anteriores jornadas, para un público que siguió las historias, aplaudió, sonrió y se conmovió con la riqueza y el poder de la palabra. Con esa palabra que es magia, memoria y cultura.

Por ese motivo, Torres, una vez terminado su espectáculo, celebró que el Festival de Teatro de este año haya tomado el giro hacia la narración oral y que contemplara no solo espectáculos sino talleres, como el de marimba que ofreció Papá Roncón, o el de cuentería para la tercera edad. Por todo ello, en esa noche de clausura, las palabras de María Fernanda Gutiérrez resonaban en el MAAC Cine.

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NOTAS

Desde el domingo
El Festival Santiago de Guayaquil ‘Un Cerro de Cuentos’ comenzó el pasado domingo y en su primer día tuvo como escenarios las cafeterías del cerro Santa Ana y el auditorio del MAAC.

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De escalón en escalón
En la cafetería el Mamey, a las 16h00 del domingo se presentó Papá Roncón. Una hora más tarde Don Pascual actuó en el Café del Cerro. A las 18h00, Misael Torres contó historias en el Galeón de Arthur’s  y a las 19h00, Ana Padovani en café Quimbita.

Colaboración
El festival contó con el aval del Municipio de Guayaquil y del Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC) y con el auspicio de varias instituciones privadas.