"Toda Rusia sufre" con los habitantes de la ciudad de Beslan después de la toma de rehenes que ha costado más de 200 muertos y centenares de heridos, declaró el presidente ruso, Vladimir Putin, en directo por la primera cadena rusa.
Los servicios especiales sufrieron "bajas considerable", añadió el presidente, según Itar-Tass, y aseguró que el uso de la fuerza "no fue premeditado".
Putin explicó que ha dado la orden de "cerrar todas las fronteras de Estado y administrativas de Osetia del Norte y bloquear la ciudad" de Beslan.
"Todos aquellos que cedan a las provocaciones serán considerados cómplices de los terroristas", añadió.
"Uno de los principales objetivos de los terroristas en Beslan era sembrar el odio interétnico y hacer estallar el Cáucaso del Norte", según Vladimir Putin.
El presidente ruso el sábado temprano a Beslan, unas horas después de concluir con un saldo de 200 muertos la toma de rehenes de un millar de personas por un comando armado en esa ciudad caucásica de Osetia del Norte.
Putin, que no tuvo ningún recibimiento especial en el aeropuerto de Beslan, se dirigió de inmediato en un minibús a uno de los hospitales de la ciudad, según la agencia Interfax.
El presidente ruso acudió al lecho del director de la escuela de Beslan, herido de gravedad en la toma de rehenes, antes de visitar la sección donde son atendidos los niños.
Medio centenar de niños y adultos se encuentran en el hospital de Beslan. Otros 428 heridos fueron hospitalizados en la capital de Osetia del Norte, Vladikavkaz, según la misma fuente.
Al cabo de media hora, Putin salió del hospital acompañadopor el presidente de Osetia del Norte, Alexandre Dzasojov, para dirigirse a la sede de la administración de Beslan.
El secuestro perpetrado por un comando pro-checheno en una escuela de Beslan, en Osetia del Norte, terminó en baño de sangre el viernes después del asalto repentino y no planeado de las fuerzas rusas y del estallido de varios artefactos que los asaltantes habían colocado en el edificio.