El proyecto incluye una fuerte apuesta por las colocaciones de la deuda interna y la ayuda multilateral para mantener encarrilado el gasto público.
 
El proyecto estructurado por el presidente Lucio Gutiérrez representa un alza de 5,7 por ciento frente al presupuesto de 6.951 millones de dólares aprobado para el presente año para el gobierno central, que incluye a ministerios y entidades adscritas, excluyendo a municipios y empresas estatales.
 
El unicameral parlamento de 100 miembros tiene hasta el 30 de noviembre para aprobarlo o negarlo en un solo debate, en el que no puede aumentar o disminuir los techos de ingresos y egresos fijados por Gutiérrez.
 
Con sus ingresos petroleros y no petroleros, en su mayoría tributarios, Ecuador cubriría el 72,7 por ciento del presupuesto, por lo que requeriría acceder a 2.000 millones de dólares a través de créditos multilaterales y deuda interna.
 
La consecución de estos fondos está atada a que el renuente mercado local absorba unos 1.243 millones de dólares en títulos y a que Ecuador consiga el aval de los multilaterales para cubrir el saldo aún sin contar con el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI).
 
 "Aspiraríamos a que el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo nos presten ese dinero sin la necesidad de recurrir a un programa con el FMI", dijo el ministro de Economía, Mauricio Yépez, quien el miércoles viajará a Washington para reunirse con ambos organismos.
 
La meta ecuatoriana es conseguir unos 500 millones de dólares bajo la categoría de libre disponibilidad para fines fiscales y otros 256 millones de dólares para proyectos de desarrollo de los organismos internacionales, agregó.
 
En el monto global del presupuesto se encuentran sumados los desembolsos en el lado de los ingresos y las amortizaciones de la deuda pública en el de los egresos, lo que permite alcanzar un punto de equilibrio contable, pero la situación cambia excluidos ambos rubros.
 
Los ingresos fiscales netos sumarían 5.344 millones de dólares mientras que los egresos ascenderían a 5.828 millones de dólares, de lo que se desprende que existiría un déficit de financiamiento de 484 millones de dólares.
 
Petróleo, impuestos, deuda y salarios
La programación presupuestaria contempla un alza de los ingresos petroleros de un 14,5 por ciento a 1.455 millones de dólares entre el 2004 y 2005 mientras que los ingresos no petroleros, transferencias y otros ingresos subirían en conjunto un 5,2 por ciento a 3.889 millones de dólares.
 
El precio para el barril de crudo de exportación se fijó en 22 dólares frente a los 18 dólares que corren para el presupuesto vigente, lo que explica el repunte de los ingresos generados por el estratégico sector petrolero.
 
El pago de los salarios de la burocracia crecería un 7,5 por ciento a 2.180 millones de dólares mientras que el servicio de la deuda pública -incluido intereses y amortizaciones- consumiría 2.393 millones de dólares, un 5,3 por ciento más de lo presupuestado para el 2004.
 
La deuda pública de Ecuador asciende a 14.000 millones de dólares, sumada la interna y externa.
 
El proyecto prevé un crecimiento de la economía de 3,5 por ciento y una inflación de 2,5 por ciento para el 2005, lo que contrasta con las metas de alcanzar un repunte del PIB de 5,9 por ciento y una inflación de entre 3 y 4 por ciento este año.