Más de un centenar de manifestantes saludó ayer  el desafuero del general Augusto Pinochet que deberá responder por los  crímenes de la Operación Cóndor, en un homenaje a los 3.000 muertos y  desaparecidos que dejó su dictadura.

Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de  Detenidos Desaparecidos (AFDD)  aseguró que hay más de 90.000 víctimas.