El secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell, informó al ministro de Exteriores griego, Petros Molyviatis, que debido a la carga de trabajo en Washington no podría viajar a Atenas para asistir a las ceremonias de clausura de los Juegos Olímpicos.
 
Según un comunicado de su portavoz, Richard Boucher, el secretario de Estado llamó a Molyviatis el viernes para transmitirle "sus felicitaciones al Gobierno y al pueblo de Grecia por acoger unos Juegos Olímpicos espectaculares, seguros y exitosos". Le propuso, además, realizar una visita a Grecia durante octubre.
 
El Departamento de Estado no menciona en ningún momento las protestas contra la política exterior de Estados Unidos que se produjeron en la capital griega horas antes de que Powell anunciara su decisión de no asistir a la clausura de los Juegos.
 
La Policía griega lanzó gases lacrimógenos para dispersar a unos 2.000 manifestantes que se dirigían hacia la embajada estadounidense en Atenas coreando consignas contra la ocupación de Iraq.
 
Un grupo de activistas griegos desplegó una enorme pancarta en uno de los costados de la Acrópolis en la que podía leerse "Powell asesino vete a casa".
 
El secretario de Estado tenía previsto llegar este sábado a Atenas para entrevistarse con el primer ministro, Costas Caramanlis, y presenciar la clausura de los juegos Olímpicos el domingo.