Un centenar de inmigrantes, principalmente ecuatorianos, expresaron este martes en Madrid su satisfacción con el anuncio del Gobierno español de regularizar la situación de aquellos que cuenten con un contrato laboral fehaciente.
 
"Sería una gran ayuda", explicó a EFE un inmigrante ecuatoriano de 45 años, que lleva tres años residiendo en España en situación irregular, empleado como albañil o jardinero.
 
La comunidad ecuatoriana residente en España, el mayor colectivo inmigrante en el país, asciende a 400.000 personas.
 
Un nutrido grupo de nacionales de Ecuador y Marruecos se dirigieron hoy a la oficina de extranjería del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales para informarse acerca de la medida anunciada por el Ejecutivo español, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero.
 
Entre los ciudadanos de Ecuador, Marruecos, Nigeria o Irán que acudieron a la oficina de extranjería, las preguntas más frecuentes se referían a los requisitos, a los plazos y a los favorecidos.
 
Aunque, tras informarse, un inmigrante marroquí explicó que "hasta que no sea seguro, no nos pueden decir nada".
 
Por otro lado, los inmigrantes irregulares de Ecuador y Marruecos que se encontraban hoy en los Consulados de sus respectivos países en Madrid, dijeron estar "muy contentos" con la noticia, pero se mostraron cautos y a la espera de que el proyecto se concrete.
 
"Valoramos cualquier cosa que sirva para regularizar la situación de trabajadores", señaló un marroquí que lleva cuatro años en situación ilegal en España.
 
Aunque los ciudadanos de Marruecos expresaron su temor de que la medida "se limite a los que tienen trabajo en este momento", como es el caso de los que llevan trabajando cinco o seis años en el país y que en este momento no cuentan con un empleo.
 
En ningún caso consideraron que este proyecto pueda crear falsas esperanzas y tener el "efecto llamada" que apuntan sus detractores.
 
Al respecto, los ciudadanos ecuatorianos explicaron que "conseguir un visado para España es muy difícil en Ecuador".
 
Por su parte, la secretaria de Estado de Inmigración de España, Consuelo Rumí, indicó ayer, lunes, que las medidas de regularización propuestas por el Gobierno español en el futuro reglamento de la ley de extranjería estarán "vinculadas al mercado laboral".
 
El próximo septiembre se divulgará el contenido del reglamento que desarrolla la última reforma de la Ley de Extranjería, en el que se concretarán estas medidas que podrían beneficiar a cerca de 800.000 inmigrantes ilegales, precisó Rumí.
 
El coordinador general de Cruz Roja Española, Antonio Bruel, aseguró hoy a EFE que las recientes propuestas en materia de extranjería son "positivas", y pidió que "no quede nadie desatendido", como por ejemplo los vinculados al servicio doméstico.
 
Bruel subrayó el hecho de que cuando se buscan soluciones para la gente indocumentada es una buena señal, y que "nunca es positivo que haya un alto volumen de personas sin documentación".
 
Asimismo, Bruel señaló que las organizaciones que trabajan con los inmigrantes deben estar presentes durante el proceso de regularización, porque "conocemos su situación".