China debe mejorar su sistema de seguridad social y replantear la política del hijo único para compensar el rápido envejecimiento de su población.

“La tendencia al envejecimiento en el país va acompañada por la presión del persistente desempleo y un sistema de seguridad social incompleto”, apuntó Zhang Xiualan, profesor de la Universidad Normal de Pekín.

Según la Comisión de Población y Planificación Familiar,  en 2050 habrá en China más de 400 millones de personas mayores de 65 años, es decir, el 24% de la población, como consecuencia de la política de un solo hijo.