China y la India serán probablemente los dos principales mercados del mundo en términos de consumo para el 2030, y su poder de compra combinado quintuplicará al actual de Estados Unidos, según un estudio del grupo bancario suizo UBS, difundido hoy.
 
El ambicioso proceso de transformación industrial y la expansión económica de ambos países abrirá enormes oportunidades a los inversores internacionales, predicen los expertos del banco.
 
Si bien es cierto que China y la India se convertirán en fuentes de beneficio para un número creciente de países, las dos naciones deberán superar aún numerosos desafíos para estar a la altura de las expectativas, pero las posibilidades de éxito son muy elevadas en ambos casos.
 
Los autores del informe señalan ciertos problemas relacionados con "la ineficacia de sectores controlados por el Estado, así como con la debilidad de los sistemas financieros".
 
Por otro lado, la previsible evolución demográfica influye de modo distinto en las perspectivas de uno y otro país. Así, la juventud de la población india significa un índice potencial de crecimiento superior al de China, pero puede tener como contrapartida una cuota de ahorro más elevada que en el país vecino.
 
En China, por el contrario, un número creciente de personas de edad podrían, en lugar de ahorrar, gastarse una parte cada vez mayor de sus ingresos, indica el estudio.
 
La intensificación del comercio internacional deberá satisfacer la demanda de ambos países y la apertura de mercados mejorará la eficacia, señalan los expertos del grupo UBS.