Fumar no es bueno para el corazón y esto es válido también para las personas de menos de 40 años, según un estudio que subraya que los fumadores treintañeros tendrían cinco veces más posibilidades de sufrir una crisis cardíaca no mortal que los no fumadores.
La advertencia proviene del especialista finlandés Markku Mahonen y sus colegas, quienes realizaron un estudio que publica este martes la revista británica Tobacco Control.
Estos especialistas retomaron las informaciones del gran estudio Mónica sobre las enfermedades cardio-vasculares realizada en 21 países de 1985 a 1995 en unos 7,2 millones de personas, bajo el auspicio de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El estudio Mónica permitió censar más de 22.000 crisis cardíacas no mortales entre 18.762 hombres y 4.047 mujeres de entre 35 y 39 años.
El 80% de esos pacientes eran fumadores, según el estudio.
Los hombres fumadores dentro de esa franja de edad corren un riesgo casi cinco veces (4,9) más elevado de tener ese tipo de problema cardíaco que los no fumadores. Ese riesgo sería aún más elevado entre las mujeres (5,3), de acuerdo con el estudio.
De todos modos, los autores del estudio no descartan el papel de "enfermedades hereditarias", como el defecto genético de coagulación designado bajo el término de "mutación del factor V (cinco) Leiden", conocido por favorecer los bloqueos en las vasos sanguíneos.
"Es posible que la interaccción entre el tabaquismo y otros factores -por ejejmplo los déficits hereditarios que afectan a la coagulación- puedan ser particularmente importantes en estos infartos de personas jóvenes", escriben los especialistas.
Pero "muchos de esos otros factores podrían no ser sencillos de tratar. Por consecuencia, los programas para dejar de fumar son probablemente la base de la prevención disponible para este tipo de pacientes" agregan.