Las divergencias sobre la entrega del mausoleo  del imán Alí en la ciudad de Nayaf, en el centro de Iraq, por parte de la milicia de Moqtada Sadr que la ocupa al gran ayatolá Alí Sistani persistían  este sábado, declaró a la AFP un cercano colaborador del clérigo radical.
 
"Propusimos crear un comité de la oficina del ayatolá Sistani para evaluar los bienes que hay en el mausoleo. Sus colaboradores en Nayaf le llamaron (a Londres) y (Sistani) dijo que era imposible realizarlo en las difíciles circunstancias actuales", afirmó el jeque Alí Sumeisim.
 
"Entonces hicimos otra propuesta: constituir un comité formado por el jefe de los Waqfs (bienes religiosos) chiítas, un contable de los Waqfs y personas en las que confía el ayatolá Sistani. Esperamos su respuesta", explicó.
 
Además de su cúpula de oro, en el mausoleo hay donaciones de peregrinos y otros bienes de gran valor. El ayatolá Sistani no quiere asumir el control del  mausoleo sin saber si no ha desaparecido nada durante los cinco meses que los milicianos de Moqtada Sadr han ocupado el edificio.
 
Por su parte, el movimiento de Sadr quiere que el comité evalúe los bienes para no ser acusado de haber robado en las reservas almacenadas en el mausoleo.
 
El jeque Sumeisim, que tiene la custodia del mausoleo en estos momentos, declaró antes que había estado en la oficina de Alí Sistani para proponer a sus representantes entregarles las llaves.
 
"Aceptaron la idea y llamaron al ayatolá Sistani, que puso como condición la evacuación total del mausoleo, que se cierren todas las puertas, tanto en el interior como en el exterior, y que se entreguen las llaves en un sobre sellado", aseguró.