La presencia de turistas disminuyó en las parroquias  de Tarqui y Los Esteros debido a la contaminación.

La Cámara de Turismo de este cantón emprendió acciones para que las autoridades de salud controlen la venta de pescado en las playas de las parroquias Tarqui y Los Esteros, sectores turísticos donde se arrojan permanentemente desechos industriales y aguas servidas.

Muchos comerciantes del Parque del Marisco, área destinada al expendio de comida típica hecha con diferentes especies marinas, decidieron no adquirir los productos que se expenden en la playa debido a las aguas negras que continúan saliendo por la alcantarilla de la calle 110, informó María Eugenia Abeiga, presidenta de la Cámara de Turismo.

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“La situación sanitaria de la playa de Tarqui debe ser una preocupación de todos, no es posible que se permita el desembarque de pescado fresco en una playa donde se arrojan aguas servidas”, dijo Abeiga.

La playa de Tarqui, uno de los puertos pesqueros artesanales más importantes del país, es utilizada para desembarcar especies en estado fresco como picudo, dorado, albacora, cherna, pez espada, tiburón, entre otros.

En este sitio, localizado a pocos metros de la salida de dos alcantarillas de aguas negras, también funcionan alrededor de 20 comedores y puestos para la venta de pescados enteros y por libra.

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María Elena Calvache, propietaria del restaurante El Acuario, en el Parque del Marisco, aseguró que han pedido que la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado (Eapam) deje de arrojar aguas servidas al cauce del río Manta, al menos durante los fines de semana, para no perjudicar a los turistas que llegan a Tarqui, donde está gran parte de la infraestructura hotelera del cantón.

Calvache, quien asegura haber visto el mismo problema por alrededor de ocho años, expresó que espera que la Eapam acelere la ejecución del plan de emergencia hidrosanitario, de manera que la playa no la sigan usando como depósito de aguas servidas.

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Katy Sabando, del Departamento de Turismo del Municipio, reconoció que hasta que no se terminen las obras del alcantarillado sanitario y las industrias dejen de arrojar desechos a la playa, el sector turístico de Tarqui no podrá recuperar su otrora reconocido prestigio, que atraía a miles de turistas de todo el país.

AFECTADOS

PROYECTO

El Plan de Emergencia Hidrosanitario, para paliar la contaminación de la parroquia Tarqui, comprende la construcción del colector Manta-Tarqui, mejoramiento de la estación de bombeo Miraflores y rehabilitación de tres lagunas de oxidación.

PROBLEMA
DISMINUIRÁ
Voceros de la Eapam señalaron que las tres obras adjudicadas a constructora Ciudad Rodrigo no terminarán de manera definitiva con la contaminación de los ríos, pero tienen el objetivo de disminuir de manera considerable el problema.

RÍOS
CONTAMINADOS
Las aguas servidas que bajan por los ríos Manta y Burro terminan en la playa de Tarqui y afectan esa área turística.