Campeón de Atlanta es un eje  del equipo nacional en los Juegos del 2004.

“Tengo mal mis pulmones, pero voy a entrenar pese a los 13 grados que hay en este momento (30.08.04) en Cuenca. Entrenaré hasta que no tenga pulmones”, fue unas de las últimas frases que Jefferson Pérez Quezada pronunció antes de partir hacia Atenas, para cumplir con su cuarta participación en Juegos Olímpicos.

Así de perseverante ha sido el marchista cuencano que, con entrega y a paso firme, llegó al podio olímpico por primera vez en 1996, cuando ante la sorpresa del mundo logró el oro en Atlanta y con 22 años fue el marchista más joven que accedió al puesto de los grandes.

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Ayer, un día antes de competir en Atenas, el campeón se sentía seguro. Es más, en una nota con la agencia AFP, Jeff dijo: “No me afecta la presión, ya que si hay alguien en los 20 km marcha que ha podido ganar todas las medallas y títulos que existen, ese alguien he sido yo. Entonces lo que pase en Atenas, será solo un regalo de Dios al Ecuador, por el esfuerzo realizado durante cientos de semanas muy difíciles”.

Esa seguridad se la transmitió a sus compañeros Rolando Saquipay y Xavier Moreno, con quienes forma el equipo olímpico de marchistas ecuatorianos. Y Luis Chocho, el hombre que descubrió a Pérez como atleta cuando tenía unos 14 años de edad, también opinaba igual: “Estamos confiados en las posibilidades del equipo y sin lugar a  equivocarme, la historia del 96 será superada en Atenas 2004”, manifestó.

Pese a la inclemencia del tiempo, por las altas temperaturas de la sede de los XXVIII Juegos Olímpicos, el andarín ecuatoriano también dijo que el circuito por donde le tocaba correr los 20 km y 50 km marcha está en las mejores condiciones. “Es posible que este recorrido con pendientes pronunciadas sea un desastre para los otros competidores; sin embargo, para mí es ideal, ya que por lo general entreno en estas condiciones, por lo que estoy satisfecho por este trazado atlético”, expresó Jefferson.

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Pérez, quien también tiene planificado competir en los 50 km marcha de Atenas el próximo jueves (a las 23h00 de Ecuador), ayer antes de su debut olímpico en el 2004, dijo: “Lo único que deseo expresar es gracias Dios, gracias Ecuador por permitirme hacer lo que más me gusta, representar a mi nación”.