Treinta guardaparques, con cuatro embarcaciones, serán los encargados de controlar la pesca de pepinos de mar que se inició ayer en la provincia insular de Galápagos, manifestó Fernando Ortiz, jefe de recursos marinos del Parque Nacional Galápagos (PNG).

El funcionario explicó que el escaso número se debe a que el Ministerio de Economía no transfiere los fondos para renovar 226 contratos de personal dedicado a labores de control en la reserva marina.

“Durante esta pesquería vamos a tener que estirarnos tanto que simplemente no podremos garantizar un control adecuado de la pesquería y del resto de la reserva marina”, dijo Ortiz.

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Otro de los problemas que se presentan y que incluso provocaron el anuncio del ministro de Ambiente, Fabián Valdivieso, de analizar la posibilidad de suspender la pesca de pepinos, es el bajo precio del producto.

Al momento se pagan 8 dólares por la libra de pepino de mar, cuando el año pasado llegó hasta 25 dólares.

El dirigente pesquero Rogelio Guaycha indicó que pedirán que la Subsecretaría de Pesca establezca precios para la libra de pepinos.