“El consumo baja por vacaciones, pero las ventas son normales como esperábamos”, sostuvo ayer Rocío Sambachi, presidenta del mercado Santa Clara, al norte de Quito. Criterio con el que coincidieron varias vendedoras de frutas y hortalizas.

En este popular mercado, según una de las vendedoras, la naranja y la mandarina han bajado su precio, al igual que el tomate y la zanahoria, debido a una producción abundante; es decir, a una sobreoferta.

En cambio, Alida Mena, quien trabaja en un local de venta de ropa en el centro comercial El Bosque, explicó que esta época es buena para el negocio. Las graduaciones de los colegios incrementan las ventas de trajes.

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Para Mena, el consumo se ha mantenido en los niveles esperados durante el año; incluso, ha podido bajar los precios debido al volumen de ventas.

Colber Espinoza, encargado de un almacén de electrodomésticos en El Bosque, dijo que las ventas han bajado, pero aseguró que esto ya se esperaba en esta época de vacaciones. Las ventas bajaron de cinco mil a tres mil dólares, el sábado. “Esto mejora en septiembre por inicio de clases con venta de computadoras”, aseguró.

Según una encuesta de Informe Confidencial hecha en junio y publicada por la Escuela de Dirección de Empresas (IDE), el 66% de los quiteños consultados no cree que sea un buen momento para comprar electrodomésticos, una sensación más marcada en Guayaquil (72%).

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Annabell Salcedo, gerenta de marketing de El Bosque, explicó que la propensión al consumo no ha bajado, pero en lugar de autos o electrodomésticos, los clientes prefieren artículos de cuidado personal, ropa, zapatos o, incluso, acudir a un gimnasio.