La oposición venezolana respetará el resultado del referendo revocatorio presidencial del próximo domingo sólo si el mismo es validado por la comunidad internacional.
 
"Acataremos los resultados electorales en tanto y en cuanto resulten validados por la OEA, el Centro Carter y el PNUD", dijo anoche el representante opositor Asdrúbal Aguiar tras reunirse con observadores del Centro Carter en Caracas, informó hoy la prensa local.
 
El Gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, ha dicho que aceptará "cualquiera que sea" el resultado del referendo que emita el Poder Electoral, y ha manifestado su "preocupación" porque la oposición de la coalición Coordinadora Democrática no ha hecho lo mismo.
 
La oposición cuestiona la imparcialidad del Consejo Nacional Electoral (CNE) y lo acusa de supuestamente maniobrar en favor del Gobierno, lo que ha sido rechazado por la directiva del organismo de comicios, que ha garantizado un referendo "transparente".
 
Chávez ha dicho que los "ataques opositores" contra el CNE formarían parte de un plan de sus adversarios para desconocer los resultados de la consulta del próximo domingo porque, dijo el mandatario, la Coordinadora estaría consciente de que será otra "avasalladora victoria chavista".
 
Los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) y del Centro Carter (CC) avalaron la labor del Poder Electoral en la primera fase del proceso de referendo revocatorio, que consistió en el control de la recolección y verificación de las firmas necesarias para convocar la consulta.
 
Ayer, los jefes de las misiones de la OEA y el CC, el brasileño Valter Pecly Moreira y Francisco Diez, respectivamente, confiaron en que el referendo revocatorio contra Chávez se celebre en paz y sin mayores inconvenientes técnicos.
 
La OEA, el CC y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) fueron facilitadores de las negociaciones entre Gobierno y oposición que tras siete meses culminaron en mayo de 2003 con la firma de un acuerdo que señaló al referendo revocatorio como la salida constitucional, democrática y pacífica al conflicto político.