El gerente del Fondo, Aníbal Borbúa, dijo que Pichincha es la segunda que captó más recursos.

Doce de los 31 proyectos que el Fondo de Inversión Social de Emergencia (FISE) planea financiar este año con recursos del Fondo de Solidaridad (FS) se ubican en la provincia de Napo, cuya capital, Tena, es la mayor beneficiada.

Los doce se refieren al arreglo y construcción de infraestructura educativa y suman 566.378,58 dólares, es decir, el 29% del monto total que el FISE recibió del Fondo de Solidaridad para la ejecución de programas sociales.

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El Sexto Convenio Interinstitucional celebrado entre ambas entidades el 18 de diciembre del año pasado contempla una asignación de 1’965.737,74 dólares para los 31 proyectos.

Según información proporcionada ayer por el gerente del FISE, Aníbal Borbúa (tío del presidente Lucio Gutiérrez y director de Sociedad Patriótica en Napo), Pichincha es la segunda provincia que captó más recursos del Fondo de Solidaridad, a través del FISE, con 545.742,75 dólares para seis proyectos.

Imbabura, Cotopaxi y Tungurahua, en la Sierra; Guayas, El Oro y Manabí, en la Costa; y Orellana y Pastaza, en la región Amazónica, registran uno o dos proyectos de esta entidad.

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Aníbal Borbúa negó injerencias políticas en la distribución del dinero e informó que el avance del convenio tiene retrasos.

El plazo para que concluya la ejecución de las 31 obras venció el 30 de junio pasado, pero el FISE pidió una prórroga hasta septiembre, con el argumento de que el Ministerio de Economía no autorizó las transferencias a tiempo. “Son obritas pequeñas, aulas escolares de 40.000, 45.000, 50.000, 80.000 dólares”, señaló.

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Necesidades
Carlos Bastidas, del área de Supervisión de Infraestructuras del FISE, manifestó que los criterios para la asignación de recursos “podrían ser las necesidades más urgentes, las solicitudes presentadas con anterioridad; incluso necesidades del momento y ofrecimientos de la Presidencia”.

Borbúa, no obstante, advirtió que “aquí no se trabaja en función política, sino en función social. Tenemos pedidos por más de 40 millones a nivel nacional y hemos visto los más prioritarios”.

Pese a que en el convenio que firmó con el Fondo de Solidaridad, el FISE consta como “entidad ejecutora”, el dinero fue transferido a escuelas y comunidades, porque “no somos ejecutores, sino financistas”, explicó.

Borbúa enfatizó que el convenio del 18 de diciembre del 2003 es el único vigente, pues el que consta en el registro del FS, en este año, se suspendió. Según los datos del Fondo de Solidaridad, este año el FISE tuvo una asignación de 2’443.162 dólares para la construcción y mejoramiento del sistema de agua potable de Tena. “Ese proyecto ya no lo hará el FISE”, dijo Borbúa.

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Esa decisión consta en una carta enviada el 30 de julio (viernes de la semana pasada) al gerente del FS, Milton Ordóñez. “Definimos que el FISE solicite reconsiderar el convenio y dejarlo sin vigencia”, señala el texto.

La Comisión de Fiscalización del Congreso investiga las asignaciones de estas entidades adscritas a la Presidencia de la República.

En Tena también está el proyecto para la edificación del colegio San José, que financiará con una asignación de 1 millón de dólares el Fondo de Solidaridad. Esta obra y su fiscalización estarán a cargo del Municipio de esa ciudad.