La primera reacción oficial a las denuncias sobre los efectos de las fumigaciones en la salud y medio ambiente ocurrió en julio del 2001. El entonces canciller, Heinz Moeller, solicitó verbalmente que dicha actividad se realizara a 10 kilómetros del límite fronterizo.

Luego, la canciller Nina Pacari propuso un memorando de entendimiento sobre el espacio de 10 kilómetros, en una nota dirigida el 10 de abril del 2003 a la Embajada de Colombia.

Los actuales ministros de Ecuador y Colombia, Patricio Zuquilanda y Carolina Barco, en septiembre pasado, acordaron la creación de dos comisiones para iniciar un estudio científico.

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La Defensoría del Pueblo y el Congreso Nacional, el pasado 15 de diciembre de 2003 y 11 de marzo de 2004, respectivamente, pidieron al Gobierno y a los ministerios de Salud, Ambiente y Relaciones Exteriores tomar medidas para proteger  la zona.