Los diarios de Estados Unidos se mostraron decepcionados del discurso del candidato presidencial demócrata, John Kerry, ante la convención de su partido en Boston, mientras analistas afirman que tocó temas considerados “republicanos”.

“Kerry habló con confianza y elocuencia, pero su discurso fue una decepción”, afirmó The Washington Post sobre el título ‘Oportunidad  desperdiciada’.

The New York Times da una buena calificación a los planes de Kerry en lucha antiterrorista, pero lamenta que no haya “suministrado una visión clara sobre  Iraq.”

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“Los electores necesitaban escucharle decir que su voto a favor de la  resolución que autorizaba al presidente Bush a invadir (Iraq) fue un error. Y  está claro ahora que Kerry ya no lo dirá y eso es lamentable”, añadió el rotativo.

Para el diario USA Today “Kerry abandona Boston sin haber mostrado a los votantes cómo conducirá a la nación en relación con los temas más urgentes: la guerra contra el terrorismo y cómo resolverá el atolladero que es la situación  en Iraq. Hasta ahora su programa se parece mucho al del presidente Bush”.

En Nueva York, en lo que hasta ahora ha constituido su mayor expresión de desprecio hacia la actual administración norteamericana, Ron Reagan,  hijo menor del recientemente fallecido ex presidente republicano Ronald Reagan, pidió que no se vote a George  W. Bush en las próximas elecciones y le acusó de “mentir desvergonzadamente”, en un artículo que aparecerá en la edición de septiembre de la revista Esquire.

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“El equipo de Bush no puede esperar que una conspiración de jueces de derechas le entregue de nuevo la Casa Blanca. Llegado el 2 de noviembre,  tendremos que elegir: podemos aceptar una mentira o restaurar una medida de  integridad para nuestro gobierno”, escribe Reagan.

“John Kerry ha retado a Bush en los asuntos que los republicanos creen que son de ellos: la seguridad nacional y el terrorismo”, indicó Benjamín Barber, un analista político que fue asesor de Clinton.

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“Los demócratas solían tener que disculparse por su candidato; ahora tienen un héroe de guerra”, señaló Larry Sabato, un analista político de la Universidad de Virginia.

Para Sabato “los demócratas odian tanto a Bush que si John Kerry hubiese leído la guía de teléfonos de Boston, aún así le habrían aplaudido”.