Los fallecimientos por las lluvias del monzón en el sur de Asia llegaron ayer a 1.238, mientras Bangladesh permanecía cubierto por las peores inundaciones en seis años y las enfermedades acarreadas por el agua comenzaban a cobrar vidas.

La inundación anual por el monzón, alimentada por nieve y lluvias, ha dejado a millones aislados o sin hogar en el sur de Asia.