Un diplomático egipcio de alto nivel reanudó sus labores este martes, un día después de haber sido liberado por un grupo militante, mientras que una salva de morteros mataba en Bagdad a un recolector de basura y hería a 14 soldados de la coalición encabezada por Estados Unidos. 
 
Elementos armados también le dieron muerte a un funcionario de un hospital en el sur de la capital. 
 
La liberación de Mojammed Mamduj Jelmi Kutb, el tercer diplomático de mayor nivel en la misión egipcia en Iraq, ocurre mientras dos grupos militantes amenazaban con dar muerte a cuatro nuevos rehenes y en medio de un incremento en el número de secuestros en el país. 
 
As Kutb llegó a la embajada egipcia en Masur, al noroeste de Iraq, donde le dio las gracias   a todas las personas preocupadas por lograr su liberación. 
 
El ejército de Estados Unidos dijo que informes iniciales indicaban que cuatro a cinco morteros habían sido disparados el martes hacia la llamada Zona Verde, en Bagdad, donde tenían sus cuarteles las fuerzas de ocupación encabezadas por Estados Unidos y se encuentran actualmente la sede del gobierno interino y las embajadas de Washington y Londres. 
 
Un mortero cayó en el suburbio de Saljiya, en el centro de Bagdad, causando la muerte de un recolector de basura y heridas a otro, dijo un camarógrafo de Associated Press Televisión News que estaba en el lugar de los hechos.
 
"Este pobre tipo solamente estaba haciendo su trabajo cuando fue muerto por un mortero", dijo el residente local Mutjana Yoma Jasun a APTN. 
 
"El blanco de ellos (los atacantes) eran las fuerzas de la coalición, no la gente de Iraq. Debido a ellos (la coalición), sufre el pueblo de Iraq", agregó. 
 
Un vocero militar, que pidió no ser identificado, dijo que los morteros hirieron a 14 soldados, pero sus nacionalidades, localización exacta y gravedad de sus heridas no han sido determinadas de inmediato. 
 
En el sur de Bagdad, hombres armados asesinaron al vicedirector del Hospital Majmudiya, dijo el jefe del nosocomio el martes. 
 
El doctor Kasim el-Obaidi fue muerto a tiros por hombres que iban a bordo de un automóvil mientras conducía a su casa la tarde del lunes, dijo el director del hospital, el doctor Daud al-Tai. Majmudiya se encuentra a unos 40 kilómetros al sur de Bagdad. 
 
También el lunes, un automóvil estalló ante una base militar estadounidense en el norte de Iraq, causando la muerte de un guardia, una mujer y su hijo, dijo la vocera militar estadounidense, capitán Angela M. Bowman. Tres soldados estadounidenses y dos guardias iraquíes resultaron heridos también. 
 
El mismo día, elementos armados mataron al coronel Musab al-Awadi, encargado de asuntos triubales del Ministerio del interior, junto con sus dos guardaespaldas al ser atacado a tiros desde un vehículo en movimiento ante su casa de Bagdad, Su hijo, Dureid, dijo que su padre fue atacado porque su hermano Rassim es miembro del Acuerdo Nacional Iraquí, partido del primer ministro interino Ayad Alaui. 
 
En la ciudad sureña de Basra, unos 50 miembros de la milicia del religioso chiíta Muktada al-Sadr detuvieron a unas 20 personas durante acciones contra supuestos vendedores y consumidores de bebidas alcohólicas, dijo la policía. Los detenidos fueron luego entregados a las autoridades. 
 
Esa noche, una bomba que estalló en un camino hirió a un soldado estadounidense en Bagdad, mientras que una granada cohete de 107mm alcanzó un camión en una base norteamericana en Balad, causándole lesiones a un empleado filipino de la empresa KBR Inc. 
 
Los incidentes de violencia han afectado los esfuerzos de reconstrucción de Iraq y han hecho que diversas naciones estén poco dispuestas a enviar soldados para ayudarle al nuevo gobierno.