Siguiendo la tradición, el presidente de EE.UU., George W. Bush, mantendrá un bajo perfil hasta que los demócratas proclamen esta semana formalmente a su rival, el senador John Kerry, como candidato a la presidencia.

Bush permanece en su rancho de Crawford, Texas, y no tiene actividades públicas previstas antes del jueves, cuando regresará a Washington D.C.

El jueves por la noche Kerry será proclamado candidato a la presidencia formalmente y el viernes Bush iniciará una gira electoral por estados clave como Missouri, Michigan y Ohio.

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A solo 100 días de las elecciones, Bush ha prometido dedicar las próximas semanas a elaborar un programa para el próximo periodo de gobierno, en el que suaviza su retórica de guerra y promete empleos, un mayor acceso a la salud y aliviar las necesidades energéticas.