Broncearse puede ser adictivo, según estudio

Tomar el sol puede causar adicción física, según un estudio realizado en Estados Unidos y publicado en el Diario de la Academia de Dermatología de ese país.

Los científicos creen que la exposición a los rayos ultravioleta puede estimular la liberación de químicos en la sangre que “levantan” el espíritu.

Los investigadores, de la Universidad Wake Forest en Carolina del Norte, explicaron que esta puede ser la razón por la cual muchas personas ignoran el riesgo de cáncer de piel y se quedan más tiempo bajo el sol.

El estudio analizó a catorce personas con edades entre 16 y 34 años, que tomaban el sol dos veces por semana. Cada voluntario fue expuesto a 15 minutos de rayos ultravioleta, primero, y 15 minutos en camas solares sin rayos UV, después.

Los científicos no les dijeron a los voluntarios en cuáles camas fueron expuestos a rayos UV. Al cabo de unos días les pidieron que escogieran las camas solares que querían utilizar primero.

El 94% escogió aquellas que irradiaban rayos UV, porque “los hacía sentir bien y los ayudaba a relajarse”. Los investigadores creen que al broncearse el cuerpo libera endorfinas en la corriente sanguínea.

El jefe de la investigación, Steven Feldman, dijo que creía que “los rayos ultravioleta tienen un efecto en los sentidos que es apreciado por las personas que se broncean”.

La Asociación Británica de Dermatólogos advirtió que los efectos a largo plazo por tomar el sol incluyen el envejecimiento prematuro.