La policía española halló un segundo vehículo que al parecer fue utilizado por los autores de los atentados del 11 de marzo en Madrid para transportar las bombas, pero la mayoría de las pruebas se perdieron tras su limpieza, indica este sábado el diario El Mundo.
El 13 de junio pasado, la policía encontró en Alcalá de Henares, a 35 km al este de la capital, de donde partieron los cuatro trenes de la muerte, un automóvil Ford abandonado a 30 metros de donde fue hallada una camioneta Kangoo blanca, en cuyo interior se encontraron detonadores y una casete que contenía versículos del Corán.
Según la radio privada Cadena Ser el automóvil era un Skoda Fabia.
Las autoridades establecieron que el vehículo de alquiler había sido robado y alertaron a la empresa de alquiler de coches Hertz para que viniera a buscarlo, sin establecer el vínculo con los atentados del 11 de marzo, atribuidos a islamistas radicales, que causaron 191 muertos e hirieron a 1.900 personas.
El vehículo, que según todos los indicios sirvió para transportar las bombas usadas en los trenes suburbanos, fue limpiado y la mayoría de las huellas borradas.
En el maletero del coche se encontró una valija con una cartuchera como las que usa la policía y varios objetos personales que pertenecían a dos de los autores de los atentados que, junto con otras cinco personas, se suicidaron en un apartamento de Leganés, en la periferia sur de Madrid, el 3 de abril pasado, según análisis de ADN.
En la maleta, las fuerzas de seguridad españolas encontraron una agenda telefónica y dos cintas sonoras que contenían versículos del Corán y cánticos de alabanza a la yihad (guerra santa), reveló la tarde del sábado la Cadena Ser.
Según esta misma emisora, en una de las cintas estaba grabada la siguiente frase: "hijos míos, debemos iniciar la revolución, ya que morir es mejor que vivir en la humillación".
La presencia de este segundo vehículo fue denunciada por un vecino de ese barrio que se quejó porque el auto estaba mal estacionado.
Ahora, la policía está investigando la posibilidad de que los terroristas contaran con una estructura de apoyo en Alcalá de Henares para llevar a cabo sus acciones terroristas.