Moeller dijo que el laudo arbitral por el IVA petrolero era consecuencia de acuerdos firmados antes de su gestión

El ex Ministro de Relaciones Exteriores, Heinz Moeller, dijo esta mañana que el arbitraje al que se sometió el país y la transnacional petrolera Occidental fue producto de tratados internaciones que se firmaron en 1993, 1997.

De esta manera, Moeller justificó que durante su gestión en la Cancillería (2000 al 2002), en las negociaciones que el mantuvo debió respetar los acuerdos anteriormente pactados con EE.UU. en el marco de la inclusión del país entre los países de preferencias arancelarias andinas.

El ex Canciller, en una entrevista concedida a Teleamazonas, explicó que Ecuador buscaba firmar, durante su gestión, un acuerdo de preferencias arancelarias con EE.UU., sobre un principio de no discriminen, y que se trate igual a las empresas extranjeras que operaban en el país, como a las nacionales. 

La finalidad del acuerdo comercial, dijo Moeller,  era beneficiar con un arancel menor al que pagan los demás países, y beneficiar de esta manera a productos nacionales como las flores, el camarón, el brócoli, y a exportaciones por 1.600 millones de dólares; a lo que EE.UU. le propuso al país, al igual que ahora con el Tratado de Libre Comercio (TLC), que se solucionen una serie de problemas  que compañías norteamericanas que trabajaban en este país.

El ex funcionario reconoce que debe  mirar con “bochorno” cómo la justicia ecuatoriana es ineficiente y no es oportuna en lo que a temas comerciales se refiere.   Uno de los temas que se trató con los EE.UU. en estas negociaciones "fueron el trabajo infantil y el IVA petrolero, que desde la época era materia de polémica, porque las transnacionales decían que sus contratos los obligan a pagar el tributo y que no se les devuelva, como sucede con los otros exportadores ecuatorianos".

Según indica el ex Ministro, el acuerdo firmado entre Ecuador, representado por Moeller; y EE.UU. por Robert Zoellick, tiene una salvedad importante, que exceptúa como materia de arbitraje los asuntos tributarios.  Lo que quedó registrado en el acuerdo suscrito fue que el país sea calificado para la ATPA.  Por lo que el ex canciller negó que en la época se haya tranzado para que se arbitre el tema de la petrolera Occidental.

“Se trabajó como un país serio, nos guste o no”, dijo Moeller al explicar que el Ecuador firmó un tratado comercial en 1997, años antes de que la administración de Gustavo Noboa trabaje con su gabinete presidencial (2000-2002), por lo que el funcionario dijo que "estaban en el deber de respetar los tratados anteriormente firmados".

Moeller niega que el país haya sido presionado para aceptar las condiciones que EE.UU. le propuso, por lo que explicó que al negociar la inclusión del país a un mercado con cero aranceles de los productos, el país tenía que sentarse a escuchar los argumentos de la otra parte, de la misma manera en que ahora se desarrollan las negociaciones para el TLC. 

“El planteamiento fue: o les pagan lo que le deben en devolución de IVA a las compañeras petroleras o nosotros no aceptamos calificar al  Ecuador en las preferencias arancelarias”, dijo el ex funcionario, al tiempo que explicó que a su modo de ver no se trataba de un chantaje, y que era el derecho en las negociaciones internacionales.

A esta propuesta, el ex Canciller se negó, por lo que acudieron al arbitraje, al que estaban obligados por el acuerdo firmado 1997.

Moeller, dijo que hace cuatro años el Servicio de Rentas Internas (SRI) le devolvió dinero a Occidental, y que tiempo después a la empresa ya no se le devolvió el tributo. Por lo que el ex funcionario exhortó a que se respeten los tratados internacionales, una vez que según acotó “el Ecuador ya no da más con su imagen de inseguridad jurídica, porque no reconoce los fallos que le son adversos, aunque la razón la tenga la otra parte”.

El ex Canciller explica que en caso de no haber aceptado el laudo arbitral, por tratarse de materia tributario, el país habría quedado fuera de las preferencias arancelarias andinas, además de haber sido juzgado por rebeldía, lo que según el funcionario "es grave una vez que el país  proyecta una imagen al exterior de no respetar los tratados internacionales".

El ex funcionario explica que Occidental no alegó ante el arbitraje la no devolución de los tributario, sino discrimen de la que fue sujeto por ser una compañía extranjera, que está en el país y que debe ser tratada de la misma manera como las nacionales.

Moeller dijo que la apelación al fallo arbitral tiene lógica, aunque la carta del tratado de EE.UU. es inapelable; sin embargo llamó a que se agoten todos los recursos para apelar.  No obstante el funcionario criticó que SRI haya reconocido que le debe $49´000.000, de los $75´000.000 que demanda la petrolera internacional, cuando Occidental no cuestiona el cobro o la cuantía a la devolución, sino el discrimen.