Un grupo de activistas estadounidenses regresaron el lunes sin incidentes a suelo norteamericano, tras desafiar abiertamente las reglas que restringen los viajes a Cuba.
 
Miembros de la Brigada Venceremos han estado haciendo esos viajes en los últimos 35 años, pero los viajeros de este año fueron los primeros en retar directamente nuevas normas de Washington que apretaron las restricciones.
 
Tras reunirse con cubanos durante dos semanas en Santiago de Cuba y La Habana, unos 90 miembros de la brigada reingresaron a Estados Unidos desde Canadá.
 
Violar las nuevas normas puede llevar a multas de hasta 7.500 dólares.
 
También el lunes, unos 100 voluntarios del grupo Pastores por la Paz ingresó a Estados Unidos desde México tras un viaje a Cuba.