Ellos aún no tienen los recursos económicos suficientes para hacer un periódico estudiantil, pero sí las ganas para elaborar un periódico mural cada quince días.
Son cuatro jóvenes estudiantes del colegio fiscal José Joaquín de Olmedo quienes dirigen el club de periodismo. Ejecutaron el proyecto hace dos meses cuando la rectora, Carmen Mosquera, les permitió destinar una horas de clases a trabajar en la cartelera.
Eso fue lo más importante, ya que el grupo tenía el entusiasmo y solo hacía falta el permiso, indica el coordinador Lenín Zerna, alumno del 6º curso especialización informática.
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Los cuatro directores del club, integrado por Zerna; Grace Castillo, alumna de 5º Quibio; Gabriela Jácome, de 6º Sociales; y Griselda Peñafiel, de 5º Informática, se reúnen un día a la semana con los 40 estudiantes colaboradores del proyecto.
En esta sesión se proponen temas, después de una votación se eliminan los que no son importantes y quedan los mejores de acuerdo a la opinión del grupo.
“Los chistes que se cuentan en ese instante se los anota enseguida para guardarlos e incluirlos en la cartelera”, señala Zerna.
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El siguiente paso lo dan los directores. Los cuatro chicos se dividen las actividades: uno se encarga de la parte deportiva, otro investiga en la biblioteca o internet y algunos conversan con otras fuentes para conocer más noticias.
El periódico mural incluye la entrevista a un profesor, redacciones y frases alusivas a uno de los valores, reportajes sobre temas especiales como el Día del Padre, fotos cómicas, acrósticos, saludos y mensajes entre compañeros.
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Todos los artículos están registrados en hojas decoradas con colores y formas.
La estrategia de la decoración –según Gabriela– es para que a los compañeros les impacte visualmente las noticias que se publican.
Los jóvenes usualmente se han reunido en la Asociación de Profesores para la planificación de actividades. Pero, a partir de hoy, las reuniones las realizarán en una sala que el colegio les ha destinado para una mejor organización.
Esa iniciativa nos motiva, asegura Jácome, porque reconocemos que nuestro trabajo es valorado por los compañeros y las autoridades del plantel.
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“Nosotros no podemos quedar mal con ellos ni con nuestros propósitos y metas”, señala.