Recuerdo una canción de mi infancia que decía “...beben y beben y vuelven a beber”, hago esta referencia a la forma cómo algunos planteles, ante celebraciones de cualquier tipo hacen el respectivo brindis con alcohol, en desacato al Acuerdo Ministerial Nº 2369 del 22 de junio de 1992, que prohíbe esa clase de consumo en dichos establecimientos.

Beben así autoridades, estudiantes y padres de familia, haciendo vana la tarea de la educación preventiva del uso indebido de drogas. Que beban y beban los peces en el río, y no las nuevas generaciones en detrimento de su salud física y mental, al ser iniciadas en eso por quienes deberían educarlas.

Alfonso Pesantes Martínez
Guayaquil