La comisión integrada por el Gobierno y el Congreso descartó el martes la posibilidad de una pensión mínima de 135,62 dólares, con el argumento de que los jubilados deben recibir una pensión según sus aportes y  años de afiliación.

En lugar de esa opción, la comisión acordó un alza diferenciada de las prestaciones y siguió el mismo esquema que utilizó el Consejo Directivo del IESS en junio para el alza diferenciada de 30, 25 y 20 dólares.

Los pensionistas por vejez fueron divididos en tres categorías: quienes reciben de 12 a 200 tendrían un incremento de 15 dólares; los que ganan de 201 a 300, de 12,5 dólares; y de 301 en adelante, de 10.

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En caso de que el aumento se ponga en práctica, la pensión jubilar mínima del Seguro General de Vejez, Invalidez y Muerte, que en la actualidad es de 25, pasaría a ser de 70 dólares, sumado el alza de 30, para esa categoría, aprobada por el Consejo Directivo y el incremento  de 15 planteado por la comisión.

Para un jubilado que recibe 250, el aumento total en este año sería de 37,50 dólares, y para pensiones de 400 en adelante, de 30.

Gabriel Riera, presidente del Comité de Paro de los jubilados, dijo que el aumento acordado por la comisión es una burla para los pensionistas del IESS. Agregó que la pensión de 135,62 es lo mínimo que puede recibir un jubilado, pues la canasta básica cuesta alrededor de  300 dólares.

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El alza aprobada el martes tendría un costo para el Estado de 34 millones; el 52% del monto total del último incremento autorizado por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), que suma $ 65 millones.

En este año, el IESS asumirá el 100% del costo del alza que aprobó en junio.