Los presidentes de Venezuela y Colombia, Hugo Chávez y Álvaro Uribe, se reúnen este miércoles para analizar la situación de seguridad en la frontera común, afectada por los grupos armados colombianos, y acordar proyectos de integración económica.
Bajo una temperatura de más de 30 grados en El Tablazo, un complejo petroquímico próximo a Maracaibo -500 km al oeste de Caracas-, Chávez y Uribe vuelven a encontrarse tras participar el lunes en Quito en la cumbre de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), esta vez para tratar una amplia agenda bilateral.
Uribe tiene previsto arribar poco después del mediodía a la base aérea militar del aeropuerto La Chinita, de Maracaibo, para una visita de cinco horas, en compañía de su canciller Carolina Barco, el ministro de Minas, Luis Ernesto Mejía, y el presidente de Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol), Isaac Yanovich. Aunque en Quito los mandatarios expresaron posiciones opuestas respecto a la búsqueda de tratados de libre comercio con Estados Unidos y Europa -Uribe a favor y Chávez en contra-, en El Tablazo buscan fortalecer la integración a fin de promover el desarrollo en la frontera y protegerla de la acción de paramilitares, rebeldes y narcotraficantes.
Uno de los temas que se espera tratarán en privado será la captura en mayo pasado de 120 paramilitares colombianos en una finca cerca de Caracas, donde según Chávez preparaban un golpe de Estado en su contra. El gobierno colombiano espera recibir un informe de las investigaciones.
Ambos presidentes quieren dar un matiz diferente a la situación fronteriza e impulsar en esta cita proyectos como la construcción de un gasoducto para comunicar a Ballenas (La Guajira colombiana) con Maracaibo, y con miras a conectar en un futuro a los dos países con Centroamérica y México.
El gasoducto, cuya construcción estará a cargo de Ecopetrol y Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), tendrá una extensión de 177 km y un costo de entre 135 y 170 millones de dólares, precisó a la AFP el presidente de la empresa venezolana, Alí Rodríguez.
"El tema energético es de particular relevancia. Se construirá con una inversión conjunta Colombia-Venezuela, en la que podrían participar terceros países, esto lo que tenemos que resolver", aseguró Rodríguez.
Según el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, en los primeros siete años el gasoducto transportará gas de Colombia a Venezuela, pero luego será "de gas venezolano hacia Colombia, Panamá, dentro de un viejo proyecto de integración que llegará hasta México".
Chávez y Uribe estudiarán también un plan de contingencia para enfrentar los derrames de hidrocarburos, el comercio de combustibles y medidas para frenar el contrabando de gasolina de Venezuela hacia Colombia, según el ministro.
"Nuestra propuesta es que nosotros le podamos vender directamente a Ecopetrol o a empresas que ellos certifiquen para nosotros poder tener un interlocutor válido y hacer una venta a precios internacionales", añadió Ramírez.
El pasado fin de semana, Uribe anunció que se autorizará el ingreso de combustible venezolano para abastecer la demanda en las poblaciones fronterizas para enfrentar el contrabando y el robo de gasolina que representan pérdidas anuales por más de 750 millones de dólares anuales.
Asimismo, los mandatarios evaluarán la construcción de un puente internacional que comunique a Puerto Santander (departamento colombiano de Norte de Santader) con Boca de Grita (estado venezolano de Táchira). Además Colombia está particularmente interesada en un proyecto de interconexión eléctrica.
En materia social, los presidentes firmarán un "memorando de entendimiento" sobre el tratamiento que se le debe dar a los desplazados colombianos que se refugian en Venezuela huyendo de la violencia.
Este encuentro da seguimiento a los compromisos adquiridos por los presidentes en las reuniones bilaterales celebradas en las ciudades de Santa Marta (Colombia) en noviembre de 2002 y Puerto Ordaz (Venezuela) en abril de 2003.