Congreso discutirá el sistema del más votado

TSE convocará a elecciones seccionales  el próximo sábado, sin fórmula para asignar escaños.

A seis días de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) convoque a elecciones seccionales, el Congreso Nacional efectuará, esta semana, un último intento para aprobar un método que reemplace al D’Hondt, derogado por el Tribunal Constitucional, para la adjudicación de puestos.

Las posiciones políticas en el Parlamento han sido adversas y los diputados no han logrado ponerse de acuerdo para aprobar el método Webster modificado (en el que los votos obtenidos se dividen para el número de representantes por elegirse, y se obtiene el total de votos de la lista), propuesto por la Comisión de lo Civil y Penal.

El Partido Social Cristiano (PSC) y la Izquierda Democrática (ID), que reúnen 40 votos, son los únicos que respaldan esa fórmula que a su criterio permite el fortalecimiento de los partidos grandes y una representación proporcional de las minorías. Sus votos son insuficientes.

Las minorías como el MPD, Pachakutik, Sociedad Patriótica, CFP, socialistas e independientes, consideran que con el método Webster modificado las minorías desaparecen.

La posición de los roldosistas ha sido clave. Los quince diputados condicionan su voto a una reorganización de los tribunales provinciales electorales, en los que reclaman once espacios adicionales.

El miércoles anterior se agotó el debate respecto del método Webster modificado y ahora los diputados miembros de la Comisión pusieron a consulta de cada partido la posibilidad de que, para el proceso de octubre próximo, se utilice el sistema de divisores continuos o de cocientes y residuos. La respuesta debe darse hoy.

Pero,  Pascual del Cioppo y Luis Fernando Torres, diputados del PSC, advirtieron que ante la falta de acuerdo político para aprobar un método de asignación de puestos, el TSE podría resolver sobre dicho mecanismo, como lo hizo para las elecciones de los asambleístas en 1997.

En esa ocasión, el Tribunal resolvió que los ganadores sean los más votados.

“En ese año se dictó una ley especial y por las facultades que esta daba establecimos una forma de adjudicación de votos”, recordó el vocal del TSE, Carlos Aguinaga (DP).

“Ahora no tenemos las facultades, si recae en el TSE (la responsabilidad de definir qué método se aplica en octubre) podría generar inseguridad jurídica y la insatisfacción de algunos partidos”, alertó.

El vocal electoral Carlos Pardo Montiel (PRE) instó al Congreso a cumplir con su obligación: “Ellos crean las leyes, tienen la obligación de darnos el método de asignación de escaños”.

La fórmula que se aplicó en 1997 consta en la página 56 del libro Propuesta de Reforma Electoral 1998, publicado por el TSE para desarrollar el tema de la adjudicación de puestos. Puntualmente dispone “que en los comicios pluripersonales se adjudicarán los puestos a elegirse en la correspondiente circunscripción, a los candidatos que hubieren obtenido el mayor número de votos en orden descendente, hasta completar el número de puestos que deban adjudicarse”.

Este texto, según los legisladores socialcristianos y socialdemócratas, se ajusta al artículo 99 de la Constitución que dispone: “En las elecciones pluripersonales los ciudadanos podrán seleccionar los candidatos de su preferencia, de una lista o entre listas. La ley conciliará este principio con el de la representación proporcional de las minorías”.