De forma infructuosa terminó este domingo la reunión entre representantes del Ejecutivo, el Legislativo y los jubilados para buscar mecanismos de financiación que permitan subir las pensiones de los ancianos en Ecuador.
 
La cita terminó con el único acuerdo de reanudar el próximo martes las conversaciones para continuar estudiando formas alternativas de recaudar dinero y elevar las pensiones mínimas a 135,6 dólares al mes.
 
El Parlamento aprobó el mes pasado un proyecto de ley para la elevación de las pensiones mínimas a la cantidad mencionada, pero el presidente de Ecuador, Lucio Gutiérrez, vetó la decisión por considerar que era una "irresponsabilidad" aprobar el alza sin tener las fuentes de financiación.
 
A su vez, Gutiérrez envió al Parlamento un proyecto de ley para elevar en un punto el Impuesto al Valor Agregado (IVA), hasta el 13 por ciento, una solución que los diputados no comparten.
 
Tampoco apoyan la medida los colectivos de jubilados, que opinan que ello significaría enfrentar al pueblo contra el pueblo y gravaría a toda la población con un impuesto directo.
 
Mientras, los ancianos mantiene su medida de fuerza en Quito y Guayaquil, donde continúan ocupando las instalaciones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) desde el mes pasado.
 
Los ancianos mantienen latente su amenaza de realizar una huelga de hambre para presionar al Gobierno a que eleve las pensiones, a las que califican de "miserables" porque algunas alcanzan tan sólo 10 dólares al mes.
 
Ecuador tiene la economía dolarizada desde el año 2000, cuando el entonces presidente Jamil Mahuad fijó en enero el tipo de cambio en 25.000 sucres por dólar, cuando en enero de 1999 estaba en promedios de 7.119 sucres.
 
Ecuador tiene ahora al dólar como patrón de intercambio en sustitución del sucre, que circuló en el país durante un siglo.