Los desniveles en varios tramos de la recientemente asfaltada Av. Quito son motivo de quejas de conductores y usuarios del transporte público que diariamente circulan por esta vía de alto tráfico en Guayaquil.

Alexandra Morales, usuaria del transporte público, se quejó por los brincos que sufren los pasajeros por la rapidez con la que conducen los choferes sobre los desniveles de la mencionada avenida.

Luis Suárez, conductor de bus, admitió que en esta vía no se puede ir despacio por ser de alta velocidad y atribuyó las quejas de los usuarios a los desniveles que, agregó, pueden dañar la unidad que conduce.

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Por su parte, Wilfrido Matamoros, gerente de la Fundación Municipal Guayaquil Siglo XXI, encargada de la obra, señaló que en el pavimento hay sitios hundidos que no se pueden reparar. “Para eso tendríamos que sacar la losa de hormigón, y eso no se está previendo ahora porque a futuro por allí pasarán los viaductos”, dijo.

Explicó que en todo el ancho de la avenida se ha colocado una carpeta asfáltica de medio centímetro de espesor con un producto denominado Slury Seal.

“Es un recubrimiento para cubrir los baches y fisuras en los pavimentos. También lo hemos puesto en las calles Pichincha, Diez de Agosto, Portete y Venezuela”, puntualizó. En la avenida Quito todavía realizan trabajos de regeneración urbana la firma Loor, Obras y Proyectos (tramo comprendido entre Manuel Galecio y 10 de Agosto) y la empresa Bueno y Castro (desde Diez de Agosto hasta Gómez Rendón).

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Las dos compañías firmaron un contrato por 570 mil dólares cada una. El valor total de la obra alcanza 1’800.000 dólares.

Entre los trabajos ejecutados por ellos están la reconstrucción de los bordillos, aceras y portales, pintado de las fachadas, cerramiento de solares vacíos o en mal estado y la instalación de mobiliario urbano, como basureros, bancas, áreas verdes y postes.