John Taylor, subsecretario adjunto del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, exigió este sábado que se castigue a los responsables de la quiebra de bancos en la República Dominicana, hechos que agudizaron a mediados del año pasado la crisis económica en este país.
 
Taylor, al finalizar una visita de 24 horas a la República Dominicana en la que se reunió con representantes del actual y del próximo gobierno, así como con líderes empresariales y del congreso, dijo que la comunidad internacional no quiere impunidad en el caso de la quiebra en línea de tres bancos comerciales locales.
 
La quiebra de los bancos, entre ellas el Baninter, dejó pérdidas a la economía dominicana por unos 3.000 millones de dólares, según las autoridades monetarias. Aunque en principio las autoridades encarcelaron a por lo menos cuatro de los acusados, entre ellos el presidente de Baninter, Ramón Báez Figueroa, todos están ahora en libertad bajo fianza.
 
Taylor desayunó en horas de la mañana con el Presidente Hipólito Mejía en la sede de la embajada de los Estados Unidos y luego sostuvo un almuerzo, en el mismo lugar, con representantes del presidente electo, Leonel Fernández. En ambos casos, Taylor insistió en la necesidad de que el país apruebe cuanto antes una reforma fiscal, un compromiso esencial para que esta nación reanude un suspendido acuerdo con el Fondo Monetario.
 
Taylor, en una entrevista con periodistas locales antes de su retorno a Washington, dijo que su experiencia le indica que la mejores reformas económicas son las bipartidistas, que se aprueban con el apoyo de dos partidos, y confió en que eso es lo que se va a dar en la República Dominicana.
 
Taylor también planteó que la comunidad financiera internacional está interesada en que la República Dominicana defina cómo va a enfrentar el déficit cuasi fiscal del Banco Central y los problemas financieros del sector eléctrico.
 
Expresó que tras los contactos que sostuvo regresa a Washington optimista de que el país tomará las medidas para estabilizar la económica y recuperar su crecimiento, con la consecuente generación de empleos.
 
Dijo que en sus contactos no ha oído que la gente quiera hacer algo diferente a lo que quiere el Fondo Monetario Internacional (FMI) para resolver los problemas de la economía dominicana, y afirmó que la reforma fiscal es algo muy importante para lograr reencauzar el acuerdo con el FMI.
 
Expresó su optimismo por la forma como se desarrollaron las elecciones y por la cooperación que ha habido en el proceso de transición gubernamental entre las autoridades salientes y el equipo del gobierno entrante.
 
Taylor resaltó las buenas relaciones entre los Estados Unidos y la República Dominicana, y definió al gobierno del presidente Hipólito Mejía como un gobierno amigo de su país.
 
Ponderó los logros de ambos gobiernos en la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico, a la vez que resaltó como un gran logro la negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos, acordada en mayo pasado.
 
También se refirió a las auditorias asistidas, con el apoyo del Tesoro de los Estados Unidos, que fueron realizadas en el sistema financiero dominicano.
 
Por último, Taylor habló del apoyo que está dando el gobierno de los Estados Unidos a la República Dominicana ante el FMI, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y el Club de París.
 
Expresó que en sus contactos con representantes de los diferentes sectores del país pudo percibir que todos entienden que debe haber un compromiso con las reformas que permitan al país superar sus problemas y recuperar el crecimiento económico.