Con camisetas que decían "Cambio de régimen en USA, no en Cuba", un grupo anti-embargo de Estados Unidos llegó con ayuda humanitaria la madrugada de este sábado a La Habana, desafiando las nuevas medidas que Washington ha impuesto a la isla.
 
El grupo pertenece a la denominada "Caravana de la Amistad Cuba-EE.UU.", cuyos miembros recorrieron 120 ciudades de Estados Unidos para trasladar un cargamento de ayuda humanitaria a la isla.
 
"Tenemos un sólo propósito: retar el bloqueo (embargo) que nuestro gobierno mantiene contra Cuba (...) el bloqueo es inmoral, injusto e ilógico", dijo el estadounidense Lucius Walker, un reverendo bautista, líder de la agrupación ecuménica "Pastores por la Paz", con sede en Harlem, Nueva York, y organizadora de esta Caravana.
 
Walker dijo que los "caravanistas" fueron amenazados por las autoridades norteamericanas al cruzar la frontera con México, notificándoles que serían multados al regresar a Estados Unidos.
 
"Eso simplemente fortaleció nuestra voluntad", afirmó en rueda de prensa al llegar a La Habana.
 
 Omnibus escolares, computadoras, medicinas y material escolar se incluyen en las 126 toneladas de esta ayuda.
 
 Es la décimo quinta ocasión que esta organización viaja a La Habana para traer asistencia humanitaria, desafiando el embargo impuesto por Washington al gobierno del presidente Fidel Castro desde hace más de cuatro décadas.
 
 Según las autoridades cubanas, este grupo ha trasladado a Cuba desde 1992 un total de 2.350 toneladas de ayuda humanitaria sin la licencia que debe otorgar el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
 
Esta agrupación está formada por más de un centenar de miembros de Estados Unidos, México, Canadá, Alemania, Dinamarca, Gran Bretaña y Bulgaria.
 
Walker dijo que un número creciente de norteamericanos quieren poner fin a la política hostil contra Cuba que data de los inicios de la revolución castrista en 1959 en plena época de la Guerra Fría.
 
Y destacó el número significante de republicanos que votaron en la cámara baja el miércoles en contra de la prohibición decidida por las Casa Blanca de enviar ropa y jabón, entre otras cosas a Cuba.
 
Washington, que sólo autorizó a tres miembros de "Pastores por la Paz" para viajar a Cuba, dijo que podrían recibir multas de hasta 65.000 dólares.
 
La llegada de los "Pastores por la Paz" coincide con la visita en la isla de 81 nortemericanos que forman la "Brigada Venceremos" y de un grupo de puertorriqueños que llegó a Cuba retando las medidas de la administración Bush.
 
Ahora a la ley del embargo se le han unido una serie de medidas del gobierno norteamericano, puestas en vigor desde el 30 de junio, para acelerar una transición democrática en Cuba.
 
Las nuevas disposiciones limitan el envío de remesas y restringen las visitas de cubanos-norteamericanos a la isla a 14 días cada tres años.
 
Washington había reducido drásticamente ya la concesión de licencias para intercambios educativos, académicos y culturales.
 
Estas medidas, calificadas por Cuba de "atroces e inhumanas", dan un giro brusco a las políticas del anterior gobierno del demócrata Bill Clinton, quien fomentó los intercambios, pueblo a pueblo, promoviendo las visitas familiares y la cooperación científica, cultural y deportiva.