En tanto, dos pensionistas (uno por jubilación y otra por montepío), fallecieron el miércoles pasado en esta ciudad.  Sin embargo, sus familiares aclararon que ellos no participaron en las manifestaciones que piden el alza de las pensiones.

Gregorio Escalante, de 74 años, murió la tarde del miércoles en el Hospital del Suburbio, donde convaleció por veinte días. “Él padecía de diabetes, y su salud estaba bastante deteriorada, no tenía fuerzas para participar en las protestas de los jubilados”, indicó Roger Mite, hijo del fallecido.

Escalante –ex funcionario municipal– recibía una pensión mensual de aproximadamente 120 dólares, y era miembro de la Asociación Publio Falconí.

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“Yo creo que si no fuera por su enfermedad hubiera participado en las protestas”, aseguró Mite. El velatorio se realizó en su vivienda (Sedalana y la 20).

Otro caso fue el de Esperanza Ruiz, de 77 años, quien falleció por causas naturales. Su hija, Patricia Ochoa, comentó que su madre recibía una pensión de montepío por viudez.