Que para ser presentador de noticias en la televisión ecuatoriana no se necesita tener una visión periodística de las cosas, no es un secreto para nadie. Esa ocupación, antaño reservada para profesionales de la comunicación, hoy puede ser perfectamente asumida por cualquiera que, no teniendo ideas editoriales definidas, exhibe, en cambio, un par de esbeltas piernas.

La semana anterior comentaba cómo, en un programa especial de Mariela Viteri dedicado al noticiario de TC, Carla Sala refería su relación editorial con el vicepresidente de Noticias de ese canal, Rafael Cuesta, como una suerte de consejería de moda y estilo, donde el criterio fundamental lo constituía el milimetraje de sus faldas. En Ecuavisa, canal aparentemente decidido a competir con TC en su propio terreno, los generosos atributos delanteros de María Teresa Guerrero son el evidente correlato glandular de las piernas de Carla Sala. Bailarinas, deportistas y modelos se acomodan mejor que los periodistas a las necesidades informativas de la televisión nacional. 

Para confirmarlo está la nueva contratación de TC en el área de información sobre la farándula y los espectáculos. Según se desprende de ella, ya no solo que no es necesario ser periodista para dar noticias, sino que tampoco hace falta, siquiera, hablar el español. No importa que a Junior, bailador brasileño del decadente grupo Ta’ Dominado, no se le entienda la mitad de lo que dice. Basta con que exhiba sus entrenadísimos bíceps y músculos intercostales, convertidos en objeto de devoción para un canal pródigo en fetiches de las más diversas características.

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Desde ‘A todo dar’, donde sentó sus reales, Ta’ Dominado (sin más atributos que los cárnicos) pasea por la parrilla de programación de TC como Pedro por su casa. Ya llegó al telediario. Ahora solo falta que Junior entreviste, en portuñol, a Patricio Dávila, otro habitúe.