Un fármaco de la empresa Pfizer Inc puede proteger el corazón de pacientes jóvenes que reciben quimioterapia e impedir que desarrollen problemas cardiacos graves después, dijeron ayer investigadores.

Un estudio publicado en el New England Journal of Medicine sugiere que el fármaco dexrazoxana puede convertirse en una herramienta útil para disminuir los efectos colaterales del tratamiento contra la leucemia en niños.

Hay unos 250.000 niños que han sobrevivido al cáncer en Estados Unidos y más de la mitad recibió farmacoterapias que hoy se sabe perjudican al corazón. Se cree que el dexrazoxana, que se vende bajo el nombre de Zinecard, absorbe los radicales libres derivados de la quimioterapia. El medicamento lleva en el mercado unos 30 años, aunque no se ha aprobado.