La carretera Guayaquil-Portoviejo permanece bloqueada desde hace cinco días por las fuerzas vivas de Jipijapa, que piden la construcción de un hospital y otras obras de infraestructura en la zona, así como la renuncia del Alcalde Víctor Lucio y los concejales del cantón. Solo se permite el ingreso de vehículos que llevaban legumbres y productos de consumo masivo, así como las ambulancias.

El paro, que se mantiene desde el pasado martes, se tornó violento esta mañana cuando los pobladores de Jipijapa y el presidente del comité de paro, Octavio Fuentes Mero, organizaron una marcha que recorrió las principales calles hasta el Municipio en donde los manifestantes procedieron a encadenar sus puertas, luego pasaron por la casa del ex concejal José Cedeño, en donde destruyeron los ventanales de la vivienda.

La marcha continuó hasta las oficinas de la Junta de Recursos Hidráulicos (JRH), donde se posesionaron de la puerta de ingreso para presionar a que las autoridades atiendan sus demandas.

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En un contacto telefónico con Gamavisión se conoció que el alcalde Víctor Lucio, quien es blanco de las críticas de las personas que participan en las protestas, se encuentra en Quito gestionando un fidecomiso para que se realice la construcción del hospital.

Los manifestantes piden la construcción de un hospital con capacidad para 70 camas, la construcción de la planta modular de agua potable por parte de la JRH, la ejecución del alcantarillado en Puerto Cayo y que el Municipio de Jipijapa habilite la planta de desechos sólidos y concluya los accesos al norte y sur de la cabecera cantonal.

Al momento la vía Guayaquil-Portoviejo permanece bloqueada debido a las barricadas en donde se observan montículos de tierra, ramas y troncos de árboles, que colocaron los manifestantes.

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Ante esta situación, las autoridades seccionales solicitaron la presencia de elementos militares a fin de controlar los desmanes.