Antes de la masiva separación de servidores del IESS, levantar una garantía de préstamo hipotecario por vencimiento del plazo, por pago anticipado o fallecimiento del afiliado, solo requería del pedido escrito que  adjuntaban al expediente original del préstamo; y sin más gastos, en un mes salía el trámite.

Actualmente, se abusa de la paciencia y de innecesarios gastos del afiliado, como presentar: una carpeta plástica color azul, para armar nuevo expediente al no tener personal para buscar el original en el sótano oeste del edificio institucional.

Una carta original con tres copias (bastaría con el pedido  del original). Un original y cuatro copias del comprobante de pago anticipado. Cuando la cancelación es por vencimiento del plazo, existe una evidencia que se da al cancelarse anticipadamente; entregar el original de pago es autoeliminar la única prueba válida utilizada para cuando falla el sistema de computo y reaparece con la misma deuda. Eso sucede siempre.

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Un certificado de la historia de dominio y gravámenes de quince años otorgado por el Registrador de la Propiedad del cantón donde está ubicado el inmueble hipotecado. El IESS tiene prioridad de constituir primera hipoteca; si autoriza se da el carácter de segunda, particular imposible de eludir. El certificado no refleja novedad, pero sí tiempo y gasto.

A más de todos esos documentos los interesados presentarán copias certificadas de escrituras de hipoteca.

Contrario a la razón, para los casos de fallecimiento del afiliado, piden copia del acuerdo de montepio conferido por el IESS a favor de la persona viuda. Es notorio la falta de coordinación entre dependencias al pedir copia de un beneficio que han otorgado.

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Son perceptibles los cambios desfavorables impuestos por la Comisión Interventora prófuga, que no aplicó una verdadera reigeniería de procesos, al suprimir personal idóneo, sin base técnica de respaldo. Se exige a las actuales autoridades aplicar correctivos en todos los trámites para que sean en menos tiempo y sin gastos innecesarios.

Ing. Fernando Guzmán M.
Guayaquil