La Suprema Corte de Israel ordenó este miércoles cambios en la ruta de la barrera de separación erigida en territorio cisjordano, señalando que el plan actual le causa muchos daños a la población palestina del área. 
 
La corte dijo que los cambios deben de ser realizados, incluso si resultan en una menor seguridad para Israel. La decisión representa un duro golpe para el sector de la defensa israelí. 
 
Israel inició la construcción de la barrera en el 2002, señalando que era necesaria para impedir el avance de bombarderos suicidas. Los palestinos dicen que la estructura, que penetra profundamente en territorio cisjordano, tiene como fin apoderarse de sus tierras. Cerca de una cuarta parte de la barrera de 680 kilómetros de largo ha sido completada. 
 
"La ruta rompe el delicado balance entre la obligación del comandante militar de preservar la seguridad y su obligación de satisfacer las necesidades de los pobladores locales", señala el fallo. 
 
"La ruta que el comandante militar estableció para la cerca de seguridad... afecta a los habitantes locales en una forma severa y aguda, al tiempo de violar sus derechos bajo las leyes humanitarias e internacionales", indica el fallo. 
 
El fallo del miércoles se centra en un tramo de 40 kilómetros al noroeste de Jerusalén. Esta sección afectaría a unas 45.000 personas que viven en 10 poblaciones, aislándolas de sus tierras, escuelas y empleos, dijo Mohammed Dahla, abogado de los afectados. 
 
La corte ordenó en marzo que fuera detenida la construcción del tramo en tanto emitía su fallo. 
 
En su decisión, la corte ordenó cambios en un tramo de 30 kilómetros, dijo la Radio del Ejército. Dahla expresó que la decisión obligaría a Israel a desmantelar incluso algunas secciones ya construidas. 
 
"La ruta de la cerca de separación viola gravemente el derecho de la población y su libertad de movimiento. Su modus vivendi ha sido afectado", señala el fallo.