Un Airbus A320 de la compañía turca  Freebord con destino Estambul que llevaba 150 pasajeros efectuó un aterrizaje  de emergencia la noche del martes en Munich (sur de Alemania) después de una  amenaza con bomba a bordo que terminó sin efusión de sangre, indicó este  miércoles la policía.
 
El presunto pirata del aire, un hombre turco de 28 años, amenazó con  accionar una bomba a los diez minutos del despegue. El piloto desencadenó la  larma y regresó a Munich, de donde había salido el avión.
 
El avión se posó a las 21h30 locales (19h30 GMT) sin contratiempos. Poco  después del aterrizaje, el presunto pirata saltó del aparato por una puerta  abierta y se hizo lesiones considerables qu eno ponen en peligro su vida. En el  momento de ser detenido en la pista no llevaba armas, precisó la policía.
 
Los pasajeros y los siete miembros de la tripulación pudieron abandonar el  avión sanos y salvos por una pasarela. La policía precisó que no encontró  ninguna bomba.
 
El presunto pirata del aire fue hospitalizado. Las razones de su acto no  fueron aclaradas de inmediato. La policía supone que se trata de un acto  aislado y no ve indicios de gesto político o terrorista por lo que se inclina  por la pista de motivos personales.
 
Según los primeros elementos de la investigación, el pirata del aire no  quiso desviar el avión. La tripulación y los pasajeros prestaban declaración.
 
Un portavoz de la policía desmintió que se hubiera producido una  intervención de fuerzas especiales, tal como afirmaron varios medios  informativos.
 
El avión charter despegó a las 20h47 locales (18h47 GMT) del aeropuerto  Franz Joseph Strauss de Munich. A los diez minutos de vuelo, el hombre amenazó  a los miebros de la tripulación con hacer estallar una bomba, sin llegar hasta  la cabina del piloto.
 
La mayor parte de los pasajeros eran turcos, precisó la policía.