El sistema oral para los juicios laborales entrará en vigencia desde el 1 de julio próximo en los juzgados de Trabajo de Quito, Guayaquil, Cuenca y Portoviejo.

Dicho sistema se ampara en la Ley Reformatoria al Código de Trabajo del 3 agosto del año pasado.

El proceso consta de una audiencia preliminar que dura unos quince días y una definitiva. En la audiencia preliminar, una vez presentada la demanda en el juzgado respectivo, dos días más tarde, el juez calificará la demanda, citará al demandado y convocará a las partes a una audiencia de conciliación. Durante esta primera fase, el juez podrá solicitar pruebas como declaraciones de testigos, inspección judicial y peritajes.

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Posteriormente, el juez convocará a una audiencia definitiva, de carácter público y estará presidida por el juez de la causa. Acudirán las partes y sus abogados y, en un plazo de cinco días, el juez dictará sentencia definitiva.

La aplicación de la oralidad en los juicios estaba prevista para el 2003, pero fue postergada por el Congreso Nacional, a pedido de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), debido a que el sistema requería de la preparación adecuada de jueces y personal especializado.