La vigencia de Neruda

Anoche estaba prevista la clausura en Quito del encuentro de escritores en homenaje a Pablo Neruda. La cita se reanudará este lunes en Guayaquil. Las mesas redondas tendrán lugar en la Casa de la Cultura del Guayas.

Las jornadas en memoria de Neruda, que se desarrollan por celebrarse el centenario de su nacimiento, llegaron el pasado jueves, a su penúltimo día. A las 16h00 se realizó la cuarta mesa redonda, en la que intervinieron dos poetas, el cubano Pablo Armando Fernández y el guayaquileño Fernando Cazón Vera.

Fernández desempolvó un par de textos que escribió en su isla natal, por la década del 60, y que, según declaró, “uno de ellos ya ni recordaba que lo había escrito”. En su intervención demostró que esos más de 40 años que le han caído a sus escritos, no los han desgastado. Por el contrario, están intactos y con una vigencia atemporal, como la poesía del mismo Neruda.

El poeta cubano nos contó varias de sus experiencias con el escritor y ganador del premio Nobel de Literatura.  Rememoró las primeras visitas de él junto a su amada Matilde Urrutia a Cuba.

Calificó como un privilegio recorrer con Neruda diversos rincones cubanos. Recordó cómo lo escuchaba hablar de su vida “como una verdadera revelación, y de cuánto entrañaban las palabras por sí mismas”.

Dijo Fernández que a Neruda le preocupaba que Cuba se aísle culturalmente, por el problema del bloqueo estadounidense y buscaba estrategias para que esto no suceda. Contó, además, otros encuentros con Neruda en diversos sitios del mundo. Esos que hicieron de su amistad con el poeta una relación cómplice, íntima. Y que desembocaron en que el chileno lo sienta como su propio hijo.

Al finalizar su ponencia, el cubano leyó un poema dedicado a este “hombre de corazón entero”, como él define a Pablo Neruda. Una obra de ímpetu oceánico.

Fernando Cazón Vera advirtió que el texto que tenía preparado, no era un estudio, ni un análisis académico, sino un escrito hecho desde el cariño que le tiene a Neruda. Cazón habló de sus primeros acercamientos a la obra del chileno. Comentó que –como la mayor parte de sus lectores– él no lo conoció por su poesía amatoria de juventud, sino por su poesía política.

Esa referencia personal la tomó para hablar del proceso de producción de Neruda, a quien definió como un poeta que iba “de lo amoroso a lo político, de lo académico a lo popular. Y que ensayó diversas formas de expresión que lo hicieron metafísico, intimista, ético,  épico,  erótico,  surrealista y sardónico,  yendo de lo elemental a lo subjetivo, del cartelismo a lo sacramental”.

Reflexionó el poeta guayaquileño que en Neruda “no hay una creación simultánea, sino sucesiva con libros que iban respondiendo fielmente a sus formas de ser y hacer, en un tiempo y lugar precisos y consolidando un mensaje comprometido que se compadecía con una tendencia política firmemente asumida y que la conservó hasta el final de sus días”.

Cazón dijo que todos los libros que constituyen la producción literaria de Neruda llevan muchísimas ediciones y que varios de sus poemas han pasado a formar parte del léxico de los enamorados que repiten los famosos versos “Me gustas cuando callas porque estás como ausente” o “Puedo escribir los versos más tristes de esta noche”.

Inauguración
El encuentro de escritores se trasladará el próximo 21 de junio a Guayaquil. La actividad se desarrollará en la Casa de la Cultura del Guayas (Nueve de Octubre y Pedro Moncayo).

Arribo
Mañana está previsto el arribo a esta ciudad de los escritores Arturo Corpuera, de Perú; Pablo Armando Fernández, de Cuba; Volodia Teitelboim, de Chile; y Thiago de Mello, de Brasil.

Inicio
Las mesas redondas de la cita ‘Neruda, el hombre y la poesía’, se iniciarán a las 18h30, con la intervención de los autores internacionales Teitelboim, Corpuera y los ecuatorianos Fernando Cazón Vera y Carlos Camacho Gómez.

Conferencias
Las charlas continuarán el 22, a las 11h00, con la participación de Teitelboim y Corpuera, Luis Félix López, Sonia Manzano y Maritza Cino.