La selección inglesa de fútbol goleó este jueves a Suiza por 3-0 y se recuperó de la dura derrota que sufrió ante Francia en su debut en la Eurocopa de Portugal, en la cual ahora mantuvo sus esperanzas de clasificar por el Grupo B.
 
El joven delantero Wayne Rooney, a los 23 y 75 minutos, y el mediocampista Steven Gerrard, a los 82, anotaron los goles del equipo inglés, que con la victoria suma tres puntos y ahora espera el partido ante Croacia con grandes posibilidades de pasar a los cuartos de final.
 
En tanto, Suiza quedó al borde de la eliminación ya que suma un punto tras dos presentaciones. En el otro partido de la jornada, Francia enfrenta el jueves a Croacia.
 
Inglaterra salió al campo con su equipo titular completo, con el central John Terry y el centrocampista Paul Scholes recuperados de sus respectivos problemas físicos.
 
Sin embargo, Suiza dominó el juego durante el primer tiempo y el inicio del segundo. Durante ese lapso Inglaterra sufrió la presión de su rival y no fue capaz de crear ocasiones claras, excepto la del gol.
 
Por su parte Suiza no supo aprovechar su mayor posesión del balón para inquietar al portero inglés y no llegó a inquietar al portero inglés David James.
 
Las cosas cambiaron tras la expulsión del defensor suizo Bernt Haas, a los 60 minutos por doble amonestación, y allí Inglaterra sacó ventajas en el juego y aseguró el triunfo.
 
El primer tanto fue la culminación de una muy buena jugada, en la cual David Beckham envió un centro pasado, cruzado desde la derecha para el delantero Michael Owen, quien recibió el balón en el área rival, libre de marcas. 
 
El estelar futbolista del Liverpool aguantó la llegada de un defensor rival y habilitó por elevación a Rooney, quien definió con un golpe de cabeza.
 
En el segundo gol, Rooney sacó un fuerte remate que rebotó en un poste derecho del arco defendido por Joerg Stiel antes de dar en la cabeza del portero y llegar al fondo de la red.
 
Los dos goles, sumados a la gran actuación frente a Francia en el primer partido, confirman a Rooney como una de las grandes revelaciones del torneo continental.
 
El tercer tanto llegó a los 82 minutos. Tras recibir un pase de Beckham, Gary Neville habilitó a Gerrard, que con un fuerte remate doblegó la resistencia de Stiel.