El Gobierno de Chile advirtió este jueves que su política exterior no contempla la posibilidad de desprenderse de territorio a cambio de un producto, en directa alusión a la propuesta de Bolivia de venta de gas para lograr un acceso soberano al Océano Pacífico.
 
"No he sabido que nosotros estemos por vender territorio o mar por ningún precio. Nunca he sabido que ésa sea nuestra política exterior y no creo que vaya a serlo", destacó el ministro de Economía de Chile, Jorge Rodríguez, en una entrevista con la emisora de radio local Cooperativa.
 
El ministro respondió así al presidente de Bolivia, Carlos Mesa, quien este jueves dijo que de inmediato podrían realizarse negociaciones para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas bilaterales si Chile acepta gas natural a cambio de ceder una porción de su territorio con salida al mar.
 
Rodríguez comentó que su país, que afronta una compleja situación energética por el racionamiento que aplica desde abril Argentina a sus exportaciones de gas natural, tiene "perfectas posibilidades de tener energía de distinto tipo y de cualquier parte del mundo", porque "la puede comprar".
 
"Chile está en una situación económica muy sana, muy robusta. Tenemos decenas de miles de millones de dólares de reserva internacional y no creo que estemos en una situación en que pongamos parte de nuestro territorio o nuestro mar en venta por un tipo de producto", resaltó.
 
"Como chileno no me parece el planteamiento del presidente Mesa", enfatizó.
 
Horas antes, la canciller chilena, Soledad Alvear, reiteró en una entrevista con la estación de televisión privada Megavisión que "nunca ha estado en la propuesta chilena cambiar soberanía por gas".
 
Las relaciones entre Chile y Bolivia, reducidas a nivel consular, se tensaron en los últimos meses por la intensificación de la ofensiva boliviana de llevar a foros regionales su centenaria reivindicación de una salida soberana al mar por territorio chileno.
 
Sin embargo, tras la reunión de Alvear con su par boliviano, Juan Ignacio Siles, en la reciente Asamblea General de la Organización de Estados Americanos, en Quito, la situación se distendió.
 
De hecho, a la fecha el Gobierno de Santiago no excluye la posibilidad de que a mediano plazo se celebre un encuentro entre Carlos Mesa y el jefe de Estado chileno, Ricardo Lagos.
 
Los dos países, que no tienen relaciones diplomáticas plenas desde 1962, salvo un breve paréntesis en 1978, se enfrentaron en una guerra en el siglo XIX por la cual Bolivia perdió su acceso al Pacífico que hasta la fecha reclama a Chile, nación que no reconoce dicha demanda.