La Cámara de Comercio de Guayaquil formó esta unidad, que ha constituido 23 microempresas y 67 compañías.

Tener el RUC (Registro Único del Contribuyente) y obtener un permiso de funcionamiento no son suficientes para que una persona sea acreditada como comerciante. Se necesita cumplir con más requisitos.

Para ello, la Cámara de Comercio de Guayaquil implementó, desde el 2002, el servicio de Ventanilla Única, que simplifica los trámites para formar una empresa.

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Al momento, en esta institución funcionan seis entidades, de las aproximadamente catorce que se requieren para este fin. Estas son: el Municipio, el Servicio de Rentas Internas (SRI), la Superintendencia de Compañías, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), el Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI) y la Cámara.

Martha Merizalde, coordinadora de la Agencia de Desarrollo Empresarial, explica que todo el proceso dura un mes. Pero la meta es demorarse entre dos y tres días.

Hasta el momento la entidad ha formado 23 microempresas y 67 compañías. Merizalde analiza que la cantidad es poca. Pero para que aumente es necesario que todas las empresas funcionen en un solo lugar. Una de las principales es el Registro Mercantil.

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Enfatiza, sin embargo, que se encuentran en conversaciones para que se sume a la Ventanilla. Pese a ello, el trámite en el Registro corre por cuenta de la Cámara.

Un comerciante que quiere formalizarse se denomina persona natural o de hecho. Pero también puede tramitar la constitución de una compañía (más de una persona). Estas personas se llaman jurídicas o de derecho. En el primer caso, el emprendedor necesita 149,44 dólares para obtener todos los documentos y un capital mínimo de 100 dólares.

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La asesora María Dolores Monge especifica que el dinero depende del tipo de negocio. En el segundo caso, la persona necesita $ 335 y tener un capital de $ 2.500.