La campaña municipal de desratización en Guayaquil comenzará después de 15 días

Dentro de quince días se iniciará en Guayaquil y en las áreas rurales de la ciudad la desratización, para lo cual se usarán 500 kilos de un raticida derivado de la Warfarina cuya compra solicitó el alcalde Jaime Nebot Saadi, adicional a los 3.000 kilos que serán importados desde Colombia y que se usarán para continuar con la campaña durante los próximos cinco meses.

Así lo indicó ayer el director del Departamento de Salud e Higiene del municipio de Guayaquil, Ernesto Romero Toro, quien además anotó que el alcalde ordenó esa compra de emergencia para eliminar las ratas que hay en la urbe.

Esta primera adquisición de raticida tiene un costo de $ 8.000 y se utilizarán 20 des-ratizadores (hombres encargados de poner el veneno en las madrigueras), los que se ubicarán en grupos de cinco en las cuatro camionetas que irán a las zonas elegidas.

“Se va a empezar en las áreas críticas donde hay mayor concentración de roedores. Con esta primera remesa vamos a trabajar en los camales, mercados, parques, y en las otras zonas donde se ha detectado el problema de alta población de ratas”, manifestó Ernesto Romero.

Anotó que se va a emitir una disposición para que los dueños de supermercados, Autoridad Portuaria, aeropuertos, terminal terrestre y urbanizaciones privadas, entre otros sitios, se encarguen de eliminar las ratas en su sector.

“En los supermercados, que es donde se concentra gran cantidad de comida, los dueños deberán hacer su programa de desratización”, refirió Romero Toro.

Según el funcionario ayer iba a recibir los 500 kilos de raticida que se adquirió a una compañía local. La compra de los 3.000 kilos la recibirá a fines de este mes ya que por ser una cantidad mayor no se consiguió en el país. Esta transacción es por $ 70.000, dijo Romero, pero después se hará otro pedido para completar el programa.

Los desratizadores tendrán la misión de visitar las áreas elegidas, ubicar las madrigueras y colocar el veneno, el cual tiene efecto inocuo, no produce olores desagradables y hace que el roedor se muera a las pocas horas de haber ingerido el raticida y después se diseque, indicó  Romero.