La Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no tiene interés en perjudicar la economía mundial a través del alza del precio de este combustible, aseguró este lunes en la capital libanesa un portavoz de esta entidad.
 
"No es beneficioso ni a la OPEP ni a los países productores de petróleo tener precios que superan un nivel razonable y aceptable para sostener la demanda a largo y medio plazo", dijo en una rueda de prensa en el palacio gubernamental Omar Faruk Ibrahim.
 
Según él, los países de la OPEP, "dependen, en gran medida cuando no exclusivamente, de los ingresos del crudo para suministrar servicios, e incluso las infraestructuras necesarias al buen funcionamiento de la economía".
 
Por ello, agregó, "si solo se busca la avaricia y el interés a corto plazo se alentará el desarrollo de fuentes alternativas al petróleo".
 
"Somos conscientes de este problema y reconocemos que los precios excesivos pueden perjudicar la economía mundial ya que el mundo actual está basado en la interpendendencia y, por tanto, la OPEP no puede escapar a esta situación".
 
Ibrahim reconoció que la demanda de petróleo este año ha sido muy superior a la del año precedente y que esto constituye uno de los factores que presionan al alza de los precios.
 
Pero advirtió de que el fuerte encarecimiento actual del petróleo se debe además de la demanda a otros factores: la especulación en los mercados de futuro, los conflictos geopolíticos y la insuficiencia de capacidad de refinamiento de gasolina en el mercado norteamericano.
 
El portavoz destacó que "la OPEP solo puede influir en uno de estos factores (responder a la demanda con un ajuste de la oferta) y no los otros tres".
 
"Por ello insistimos en que la estabilidad del mercado beneficia a todo el mundo y que esto requiere la cooperación de todas las partes", añadió.
 
La OPEP está preocupada por "la seguridad y estabilidad mundial", en especial por la de Arabia Saudí e Iraq, dos miembros fundadores de esta institución sacudidos por la violencia.
 
Los ministros de Energía y Petróleo de los 11 países que integran la OPEP celebran el próximo jueves en Beirut una reunión extraordinaria, centrada en la propuesta de Arabia Saudí de aumentar la oferta del grupo en al menos 2 millones de barriles diarios para hacer bajar los precios del crudo.
 
Ibrahim se negó a hacer conjeturas sobre el resultado de dicha reunión y estimó "todas las opciones están abiertas".
 
La reunión del jueves es la quinta que la OPEP -que controla dos tercios de la producción petrolera mundial- celebra en la capital libanesa.
 
El portavoz recordó que esta vez la conferencia de los ministros estará marcada por "la preocupación de los productores y consumidores por los altos precios actuales del crudo".
 
"Nuestra reunión en Beirut es para mostrar nuestra simpatía al gobierno libanés y alentarle en sus esfuerzos de reconstrucción", agregó, señalando que esto entra en la marco de la política de cooperación de la OPEP con los países en vía de desarrollo y no miembros de la organización.